Cuando hablamos de magia o brujería debemos tomar en cuenta si lo hacemos con superstición o por realidad. Algunas personas tienen temor a mencionar cualquiera de las dos palabras que son motivo de esta entrada.
La razón por la que me pongo a escribir sobre estos dos asuntos es por que algunas personas manifiestan temor al escuchar que le están haciendo brujería, que le tienen un mono enterrado, que tienen su efigie o fotografía clavada de alfileres, etc.
De igual forma encontramos anuncios en periódicos, revistas, radio y hasta en televisión y ahora por internet, manifestando que las personas o grupos que se anuncian son capaces de sacarlos de la pobreza, de quitarles la salación, de atraer al ser amado, de hacer amarres con quien usted desea tener alguna relación o inclusive llegar al matrimonio, muchas de estos servicios son meramente un engaño y lo único que le quitan es su dinero. Sin embargo existen muchas personas que acuden con ellos a que le presten sus servicios.
La realidad es que la brujería no existe, pues lo que hacen dichas personas llamados brujos o grupos de personas que se dedican a estos menesteres es influir en su mente para que crea a pie juntillas que en realidad alguien le tiene envidia y lo está perjudicando.
La brujería ha sido motivo de estudio desde hace ya varios siglos, pero no como lo entendemos en la actualidad o como nos lo quieren hacer saber quienes se anuncian para hacerles los trabajos ya mencionados en párrafos anteriores. Los brujos que se mencionaban solo eran aquellas personas que hacían y hacen uso de conocimientos heredados de sus ancestros o bien que estudiaban en alguna escuela dedicada a ello.
Así encontramos a curanderos que conocían bien el uso de plantas medicinales, algunas formas de hablarle a su paciente, etc., que permitían encontrar la salud o la tranquilidad, pero no para hacerles daño alguno.
Por otro lado cuando se habla de la magia nos encontramos que por lo general se confunde con la brujería pues piensan que un mago buscará siempre hacer el mal a las personas, lo que en realidad es falso, pues estos personajes lo que hacen es utilizar y aprovechar las leyes naturales para generar condiciones, materializar objetos, tratar de interpretar situaciones de las personas para hacerle algunas recomendaciones, entre estos individuos podemos mencionar por ejemplo a los oráculos griegos, a los magos del Egipto, a los magos persas, los magos de oriente, que en realidad son lo que ahora podemos llamar investigadores de las leyes naturales para aprovecharlas en bien de la humanidad.
Quizá podamos confundir ambos conceptos, magia y brujería por aquello de la división de magia negra y magia blanca.
Lo dejo a vuestra reflexión.
ISRAEL
