Una de las frases famosas de JESÚS EL CRISTO días antes de ser crucificado, fue "El hijo del hombre tiene que morir para que se cumplan las palabras de los profetas".
¿Cuál es el significado de tan terrible verdad?, pues bien vamos a analizar dicha frase, recuerden que Jesús era considerado por los maestros como el hijo de Dios hecho hombre, así pues esta frase enseña otra gran lección, ya que era preciso que a Jesús, el mesías, se le diera por muerto para que sus enseñanzas se difundieran por el resto del mundo, de esta manera él dio las instrucciones en la ceremonia de la cena previa a su detención y crucifixión, fecha en la que se reunió con los otros doce, en ella les indicó que debían seguir a Pedro como su líder físico, pues él seguiría dictando instrucciones cuando se reunieran periódicamente.
Para entender esto, quiero decirles que aunque la iglesia nos ha venido diciendo que Jesús murió al ser crucificado, la verdad es que no fue así, ya que sus discípulos se preocuparon para que no le fueran fracturadas las piernas como era costumbre para que el crucificado muriera por asfixia, de esa forma, José de Arimatea, un funcionario influyente entre los romanos y a la vez discípulo de Jesús, logró conseguir este beneficio, además que se le permitiera recuperar el cuerpo de su maestro para llevarlo a un depósito para cadáveres que era propiedad de su familia y en el cual no había estado cuerpo alguno.
Ahí en ese lugar algunas mujeres que pertenecían al círculo de discípulos de Jesús procedieron a curar las heridas de su maestro con las hierbas y artes que conocían, dejándolo reposar para que se recuperara.
Así una vez recuperado él aparece de nuevo y les da las últimas indicaciones a sus discípulos entre ellas les entrega el ministerio de la enseñanza, el perdón de los pecadores, advirtiéndoles que por quienes les perdonaran sus pecados, ellos deberían hacer penitencia de compensación de la ley Cósmica al respecto.
Una vez que hizo ésto se despide yéndose al convento de los hermanos de blanco, secta a la que él pertenecía, donde estuvo al cuidado de los habitantes del mismo hasta su muerte cerca de los setenta años.
Durante los siguientes años de su retiro de la vida pública por medio del sufrimiento de la crucifixión, siguió reuniéndose periódicamente con los apóstoles para recibir informes y darles nuevas enseñanzas.
De esta forma muere el hijo del hombre y dirige a sus discípulos cercanos como HIJO DE DIOS.
El que esté preparado que entienda.
Israel.
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